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Dicho sendero arranca en la calle Teresa Córdoba y continuará por la conocida como la carretera de la Molina y es una de las zonas más transitadas por los viandantes
El Ayuntamiento de Rute ha adjudicado las obras del primer tramo del sendero peatonal que se va a construir, en la carretera que va de Rute a Carcabuey. El sendero arrancará en la calle Teresa Córdoba, y continuará por la conocida como la carretera de la Molina. Se trata de un tramo muy transitado por los viandantes y utilizado por las personas que les gusta caminar o correr. En total, diecisiete empresas han participado en el proceso de licitación llevado a cabo por la administración local. La adjudicataria para llevar a cabo la mencionada actuación ha sido la empresa Ingeniería y Gestión del Sur, por un importe de algo más de doscientos diecisiete mil euros.
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Esta iniciativa se enmarca dentro del os proyectos correspondientes al Plan Córdoba 15 de la Diputación de Córdoba y relativos al año 2022. De hecho, fue en enero de ese año cuando comenzaron los trabajos del estudio topográfico para la construcción de dicho sendero. Sin embargo, el teniente de alcalde, Rafael García, y responsable del área de Obras e Infraestructuras, ha dicho que esta actuación fue “uno de los primeros problemas con los que tuvo que enfrentarse el actual equipo de Gobierno”, con David Ruiz a la cabeza. Rafael García afirma que “los fondos para llevar a cabo esta obra estuvieron a punto de perderse”.
Según el responsable de Obras e Infraestructuras, el anterior equipo de Gobierno de PSOE e IU, “no habían iniciado los trámites necesarios para poder ejecutar las obras”. Por tanto, era obligatorio devolver la subvención concedida, en su día, por la Diputación provincial. De ahí, la necesidad de tener que solicitar una prórroga al actual Gobierno de la entidad provincial, ahora bajo las siglas del PP, apunta García. De no haber sido así, los algo más de doscientos mil euros para el sendero se hubieran perdido.
Ahora, con las obras ya adjudicadas a una empresa para su realización, y una vez comiencen, el plazo de ejecución es de cinco meses. En principio, está previsto que la obras se inicien a primeros del este julio.
La primera fase del sendero tendrá una extensión de algo más de un kilómetro. El presupuesto con el que se cuenta, informa García, incluye las necesarias medidas de seguridad y protección que hay que colocar y la iluminación del mismo, y no ha permitido que la actuación se lleve a cabo sobre una mayor superficie. El proyecto inicial abarcaba unos 2,6 kilómetros. Rafael García considera estamos ante una zona muy utilizada por los ciudadanos y que hay que cuidar. De hecho, asegura que, hasta los propios técnicos provinciales, cuando han visitado la zona, se han sorprendido del número de personas que transitan la vía a diario.
